Soy la típica mamá que no deja de compararse, fue mi primer pensamiento al empezar con esta entrada tan personal🤦♀️ , ahora mismo tengo tanto en mi cabeza que no se como organizarlo. Esta semana (en la que escribí esto) ha sido bien cargada y no lo digo de buena manera, dolores por aquí, afanes por allá, tristezas, preocupaciones nada nuevo ¿verdad?
El punto es que en mi humanidad me dejo agobiar, los niños gritan, lloran, no dejan de decir mamá mamá mamá y como buena emigrante con niños pequeño no podemos y nos da terror dejarlo fuera de nuestro cuidado, así que mientras papá lleva todo el peso financiero mamá lleva todo el peso del hogar y asi pasan los dias…
No se puede negar que estar en el HOGAR es maravillo, compartir con los niños, oler a mi pequeña y enamorarme de su sonrisa pero mentiría (y toda mamá que lo diga puede estar metiendo 👀) que cocinar todos los días es super divertido sobre todo porque después se tiene que lavar una montón de platos y cucharas y vaso que se multiplican solos, o que me encanta poner tres lavadoras y doblar toda esa ropa 😩😩
Lo que quiero decir con todo esto, es que la maternidad y la vida en el hogar es maravillosa pero también caótica, es increíblemente difícil estar con ellos todo el día, todos los días, son caprichosos, egoístas, berrichosos, impulsivos y bulliciosos. Ponen a prueba mi paciencia; así que tiendo a pensar que no lo estoy haciendo bien, dudo de todo lo que estoy construyendo y en esa duda me cuesta descifrar la vida que Dios tiene para mi. Pero luego, en medio de todo ese caos me queda claro que el Señor esta refinado mi cabeza, mis grandes ideas y mi corazón duro, quiere que aprenda a vivir una vida de hogar para su gloria, curiosamente yo había hecho planes (y sigo haciendo😅 ), y juraría que eran/son los mejores pero El Señor conocía/conoce si son buenos o no para mi.
En medio de todo este caos, también, El Señor nos ha rodeado de un increíble cuerpo de creyentes que le buscan, le sirven y nos han cuidado y orado por nosotros. Se que mis hijos aunque están pequeños y mi propio corazón, ha visto el cuerpo de Cristo en su mayor expresión y muchas veces hemos recibido la provisión de Dios, su bondad y la esperanza que tenemos en él de ellos cuando las cosas son y siguen siendo difíciles 💛💜🌷
Gracias por cuidarnos❤

Pd: estamos en días de post huracán, luego les cuento un poco sobre ello, todo esta bien y mi maternidad sigue siendo caóticamente hermosa, espero que todos estén bien.
Con cariño, Ingrid💛